Antes de convertirme en uno con Dios decidí explorar el cosmos y así me fui adentrando en un círculo de eternas vórtices que me regalaría a mi mismo. Esta gran aventura tomó lugar en la gran maquinaria espiritual entre las montanas de mis antepasados y de lo que siempre fue.
Los 13 domos se sentaron enfrente de mí, como una ilusión que nunca existió y como un comando de Dios que se nos vino a caer encima, una maldición para los de la hermandad y un canto para los pájaros prehispánicos. ¿A donde vas Netzahualcóyotl? Que ya viene más trabajo para ti. Canta y abre tus alas.
Así me postré y empezaron las tres meditaciones.
En la primera meditación; luz, mucha luz de colores arcoiriticos que no puedo ver en otros lados. Runas futark y no futark, jeroglíficos que se activan y no me dejan ver mas que miles y miles de planas de ellos. Nuestro cosmos esta compuesto de ellos. El mundo,las aves, las personas y las cosas materiales. Todos estamos compuestos por este arco iris de miles y millones de formas.
En la segunda meditación se me vinieron desde las estrellas y los grandes montes y montanas de espiritualidad mis amigos lamas. Llegaron los tibetanos y se postraron alrededor de nosotros miles de ellos. Traían sus cantos mantricos, activaron mi ser interno. Todos ellos con sus túnicas y de pronto un vórtice enorme sacudió a todos y se convirtieron en un tornado de oraciones. Miles de ellos conformaban mis cantos. La tierra se construía por medio de sus sagradas voces.
En la tercera meditación mi verdadero nombre llegó. Me sentí de nuevo un niño que era bautizado, un centenar de dragones expedían luz verde y por ultimo me enredaban como si fuera su cría. Ellos me bautizaban y me quedaba ahí postrado ante un poder que no comprendía mas sin embargo yo sería para ellos ya la última búsqueda de su luz verde. Desde sus bocas expedían fuego, fuego luz, fuego amigo, fuego vida y por como consiguiente fuego creador de dimensiones, paz, galaxias y redención. Llegue a casa y me siento como un ser dragón.
Lahat Kan
[Este escrito fue inspirado en mi visita al CREST Yepomera y gracias a las meditaciones efectuadas ahi]
AHO METAKUYE OYASIN, SARBAM BANDALAM, SALAM ALEKUM, OM MANI PADME HUM Y QUE TODOS LOS SERES ESTEN BIEN Y FELICES.
