viernes, 23 de abril de 2010

[Lit] La cabalgata de los cardenales




Es primavera en Indiana, el bosque es fresco y a veces templado, con un clima bastante paradisiaco diria yo. Manejaba mi carro iba cansado y pare en un semaforo en rojo, curiosamente...rojo.

Era tarde y caia el sol, escuche un ruido poco comun y voltee hacia arriba, entonces vi una docena de helicopteros en el cielo que volaban rozando los techos de este pequeno pueblo. Como buen cineasta que soy recorde la escena de "Apocalypse Now" o "Apocalipsis Ahora" en donde como caballos galopando entran a la pantalla un centenar de helicopteros rumbo a Vietnam. Atras de ellos los impulsa la musica de la "Cabalgata de las Valquirias" compuesta por Wagner. Una escena realmente espeluznante!

Asi que aqui tenia yo a estos amiguitos de la MATRIX, estos vehiculos de guerra galopando matando mi paz y mi tranquilidad, llevandose el momento y la vida de nuestro alrededor en el bosque hermoso, realmente todo era verde paz hasta que llegaron. Me transporte a la batalla que libro a diario en contra de este sistema que nos ofrece casi pura muerte y destruccion (espiritual, mental y fisica).

De pronto un cardenal rojo, pequeno, pareciera insignificante, volaba aeroplaneando abajo de estos helicopteros. Su belleza de pronto opaco todo a su alrededor. Era el, el verdadero rey de los aires. Su naturaleza de ser lo impulsaba a ser mejor que aquellos demonios con helices, la cabalgata de los cardenales empezo y con ella mi corazon palpitaba como el aeroplaneo de sus fragiles alas. Senti una esperanza que hace mucho no sentia!

De pronto la naturaleza se recuperaba, los helicopteros parecian enfermos, tornaron de color a un gris sucio, estaban titubeantes y el cardenal rojo se veia mas grande y majestuoso que nunca. La naturaleza venia con una belleza inquebrantable. El cardenal de inmediato paso de ser la victima a un gigante de paz y armonia.

El pajarillo irrumpio la escena quitandole lo violento a los helicopteros como un relampago rojo, como un dedo de Dios, llego a quebrantar la supuesta paz que tenian los helicopteros como un profeta de la verdad. Los demonios con helices para entonces ya no tenian la misma fuerza que antes y poco a poco se desvanecieron en lo artificial de sus apestosos humos.

Llego el verde, fue momento de partir!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que estas madurando como escritro Felicidades, las cosas mas sencillas pueden ser muchas veces las mas interesantes, excelente tema y descrito de una manera excelente, realmente vi las escenas, Felicidades creo que ya deberias de empezar a escribir tu libro.

Anónimo dijo...

Te digo, sigues parado en un pozo bucando agua, pero será cuando tenga que ser...

UUC KAN

Katya dijo...

que cosas tiene la vida!!! tu sigue dandole duro al brainstorm!!!!! ya se paso el tsunami????o ya casi???? un beso ik